¿Qué es la economía informal y qué efectos tiene en el crecimiento?

https://www.celag.org/wp-content/uploads/2018/07/Peru-nico-scaled.jpg

La economía informal se refiere a aquellas actividades económicas que funcionan fuera del control gubernamental. Estas actividades no están inscritas ante las entidades fiscales, por lo que no aportan a la recaudación tributaria oficial. No obstante, la economía informal es un elemento esencial para el funcionamiento tanto económico como social de numerosos países, especialmente en naciones con economías en desarrollo y emergentes.

El término abarca una amplia gama de actividades laborales que van desde vendedores ambulantes, servicios domésticos, hasta trabajos de construcción no regulados. Según un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), aproximadamente el 61% de la fuerza laboral mundial estaba empleada en la economía informal en 2018. Esto demuestra la significativa presencia de este sector en la economía global.

Impacto de la economía informal en el crecimiento económico

La economía informal tiene tanto impactos positivos como negativos en el crecimiento económico de un país. Por un lado, proporciona empleo y subsistencia a millones de personas que de otro modo podrían encontrarse desempleadas. En países de América Latina como México y Perú, la economía informal representa una proporción considerable del PIB, ayudando a mantener el consumo interno.

Por otro lado, la carencia de regulación y formalidad también implica una variedad de retos. La falta de aportes fiscales reduce la habilidad del gobierno para invertir en infraestructura, educación y servicios públicos, lo que puede obstaculizar el progreso a largo plazo. Además, los empleados en el ámbito informal generalmente no cuentan con protecciones laborales ni acceso a beneficios de seguridad social, incrementando su vulnerabilidad.

Casos prácticos y ejemplos

Un ejemplo destacado es el de India, donde la economía sumergida constituye más del 50% del PIB y emplea aproximadamente al 90% de los trabajadores. Durante la pandemia de COVID-19, numerosos trabajadores informales se quedaron sin apoyo, lo que puso en evidencia la inestabilidad de sus condiciones de trabajo y la necesidad de implementar políticas de protección más robustas.

En Brasil, el programa Simples Nacional ha tratado de regularizar pequeñas empresas utilizando un esquema de impuestos simplificado. Este programa ha logrado cierto éxito al atraer negocios hacia la oficialidad, lo que ha aumentado la recaudación fiscal y ha extendido la protección social para los trabajadores.

Retos y posibilidades

Formalizar la economía informal representa un desafío significativo. La burocracia excesiva y la falta de incentivos adecuados a menudo disuaden a los empresarios de registrarse formalmente. Sin embargo, también existen oportunidades. Iniciativas de digitalización y acceso a microfinanciamiento pueden facilitar la transición hacia la formalidad, aumentando así la resiliencia económica y fomentando un entorno de crecimiento más inclusivo.

Un método integral precisa de medidas gubernamentales que aborden las demandas particulares de los empleados y negocios informales. Esto abarca desde cambios tributarios que reduzcan los obstáculos para ingresar al mercado formal, hasta iniciativas de formación que proporcionen competencias técnicas valiosas a los trabajadores.

Reflexión final

La doble naturaleza de la economía informal resalta tanto las oportunidades como los retos, lo que pone de manifiesto la complejidad de su función en el avance económico. Comprender su magnitud y relevancia es crucial para crear políticas más efectivas que aumenten su impacto positivo en el bienestar social mientras se atenúan sus riesgos naturales. La transformación hacia la formalidad, si se lleva a cabo adecuadamente, puede ser un impulsor clave para el desarrollo sustentable en las economías globales.