(Reuters) — Un tribunal holandés ordenó el viernes a un hombre que, según los jueces, es el padre de entre 500 y 600 niños en todo el mundo que deje de donar esperma.
El tribunal prohibió a un holandés de 41 años donar esperma en clínicas. Podrían multarlo con 100.000 euros ($110.000) por el crimen.
El tribunal también ordenó al hombre que escribiera a las clínicas de otros países pidiéndoles que destruyeran todo su esperma en el stock, excepto las cantidades reservadas para los padres que ya tienen hijos.
La decisión siguió a un caso civil presentado por una fundación que representa los intereses de los niños y padres de donantes holandeses que se habían vuelto hacia el hombre como donante.
Dijeron que las continuas donaciones del hombre violaron los derechos de privacidad de sus hijos donantes, cuya capacidad para entablar relaciones románticas se ve obstaculizada por el temor a las relaciones sexuales y el parto indebidos.
Las numerosas donaciones del hombre salieron a la luz en 2017 y se le prohibió donar a clínicas de fertilidad en Holanda, donde ya tenía más de 100 hijos.
Sin embargo, continuó donando a otros países, incluido el banco de esperma danés Cryos, que opera en otros países.
El hombre también continuó trabajando como voluntario en sitios web que conectan a futuros padres con donantes de esperma, a veces usando un nombre diferente, según el periódico Algemeen Dagblad.